> ESP
> ENG
El problema

 

Más que problema, en esta ocasión hablaremos del desafío que nos planteó el Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (CIDESI). Esta institución adquirió con el estado de Querétaro el compromiso de crear un centro de investigación con infraestructura para poder dar un servicio de investigación a la industria aeroespacial: el CENTA.

Tras 15 años de relación, el CIDESI se acercó a Grupo CTT para poder colaborar en un proyecto de un equipo especial para realizar pruebas de Low Cycle Fatigue en alta temperatura. Estas suelen utilizarse en las turbinas de los aviones y corresponden a un área de escaso desarrollo en México hasta ese momento. 

Uno de los requerimientos es que permitiera realizar pruebas con temperaturas que oscilan entre los 1,000 hasta los 1,200 grados centígrados con un amplio espectro de materiales.

 

La solución

 

Desde el principio, tuvimos claro que el aliado ideal para realizar este proyecto era MTS, que tiene un amplio expertise en este tipo de pruebas en todo el mundo. MTS cuenta con un excelente producto Landmark con capacidad para las cargas solicitadas. Como ya sabíamos, el gran reto iban a ser las altas temperaturas, ya que requerían de un horno especial y un extensómetro para poder medir y controlar la deformación de los especímenes a dichas temperaturas. 

 

El beneficio

 

El resultado fue un sistema único en México. De hecho, hasta ese momento, la mayoría de estas pruebas eran enviadas a un laboratorio de España, lo que suponía una gran complicación logística y un mayor tiempo de respuesta. Instalado el equipo, se eliminaron los tres o cuatro meses de espera que daba el laboratorio español y los costos derivados de esta operación, y pronto se tuvieron que comprar cuatro máquinas más para cumplir la demanda de la cantidad de pruebas que el cliente necesitaba. 

 


0 Comentarios

Deja un comentario

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *